Capítulo 22

En aquel momento, Danny deseaba haber sido un imprudente y haber cedido a la ardiente necesidad que había ardido como lava líquida en sus venas, aquélla que lo había instado a tomarla y a hacerla suya. Si lo hubiera hecho, ella estaría ahora en la cama con Harry y con él, rodeándolo con sus piernas, tensándose en torno a su miembro mientras gritaba de placer. Y él no estaría en un bar de Sutton, duro y dolorido, preguntándose cómo Alex podía casarse con un idiota como Poynter. Preguntándose qué iba a hacer sin ella. ¿Y si Alex se hubiera quedado con ellos? ¿Y si se hubieran cumplido sus peores temores? No «si» sino cuándo. Si ella se hubiera quedado, eso habría ocurrido sin duda. Harry habría insistido en que se lo contara todo. ¿Cómo habría reaccionado ella?

Danny se tomó el segundo whisky y se reclinó en la silla. Sólo cuando tenía la mente ligeramente confusa se permitía pensar en Heather. Era una chica complicada. Apenas tenía dieciséis años. Era pura alegría cuando la vida la sonreía, y muy desdichada cuando la pateaba. A menudo, Heather había mostrado ambas facetas el mismo día. Danny había intentando resistirse, pero no había podido evitar sentirse atraído por ella, por alguien cuya vida era una enorme bola de sentimientos, alguien que pensaba que había que experimentarlo todo sin restricciones. Al final, esa volatilidad suya había sido su ruina. Soltó el vaso de whisky sobre la mesa y con un gesto pidió la cuenta. La joven de la sonrisa descarada se apresuró a traerla, tomó el dinero y se largó.

Sintiéndose viejo a pesar de tener sólo veintiséis años, Danny se levantó y salió al húmedo aire del atardecer. Soplaba una ligera brisa. El verano lo envolvía con su empalagosa fragancia. El dolor le retorcía las entrañas. Alex no era Heather. Ella controlaba mejor sus emociones, cierto, y era mucho más madura. Estaba herida. Danny lo había notado la noche que la había alejado de él con aquellas viles palabras. Alex había estado protegida, no como Heather. No había sufrido lo peor de la vida gracias al coronel y a sus hermanos. Pero, ¿qué haría Alex si se encontrara de repente en la misma situación que Heather?

Danny no lo sabía. E incluso aunque sintiera aquella opresión en el pecho durante el resto de su vida, debería estar agradecido de no haber corrido el riesgo de averiguar la respuesta de la manera más dura.

Eran casi las nueve cuando Danny se sentó tras el volante del jeep de Harry. Su primo ya estaba dentro, sombrío y agotado.

-¿Estás seguro de que no quieres quedarte toda la noche? -preguntó Danny.

Harry se giró mirando a través de la oscuridad la casa silenciosa.

-No.

-¿Estás bien?

Asintiendo con la cabeza, Harry posó las manos sobre los muslos. Harry parecía completamente exhausto tanto física como emocionalmente. Danny conocía el placer de acostarse con una mujer hermosa. Sin embargo, podía comprender a Harry, como si sus largos maratones sexuales fueran intentos de desterrar algunos demonios interiores y no sólo la búsqueda extrema del placer físico.

-Bueno -Harry vaciló-, ¿llevas mucho tiempo esperando?

-Un rato -dijo Danny encogiéndose de hombros-. Pero no importa.

-¿Cuánto tiempo?

-No lo sé. -Danny se centró en la carretera para evadir la pregunta. Su respuesta sólo haría que Harry cayera en una espiral de culpabilidad innecesaria.

-¿Cuánto tiempo? -La desolada exigencia en su voz resonó en el jeep suspirando, Danny contestó. De cualquier manera, Harry lo averiguaría tarde o temprano. -Unas dos horas. -Lo que hacen un total de ¿cuánto? ¿Tres o cuatro horas? Maldita sea.

Incluso bajo la luz de las farolas, Danny podía ver la vergüenza que cubría los elegantes rasgos de su primo.

-Deja de torturarte, primo. Parecía una mujer satisfecha.

Harry la había hecho enloquecer, había llevado a la mujer a la sima; hasta que sus gritos casi echaron abajo las paredes.

Harry le dirigió una mirada penetrante.

-¿Te lo ha dicho Kate?

-No. Se quedó dormida después de que la bañaste. Pero por lo poco que pude oír antes deduje que se durmió con una sonrisa en los labios. ¿Qué es lo que ha sucedido?

-Lo sabes perfectamente bien. Ya ha ocurrido antes. - Harry se pasó la mano por el despeinado cabello -. Perdí la cabeza.

-¿Por qué sigues torturándote? Esto no ocurre cada vez que mantienes relaciones sexuales. Ni tan a menudo como crees. Además, parecía como si Kate hubiera disfrutado mucho.

Harry asintió a regañadientes.

-Porque esta vez sentí una necesidad más fuerte. Danny es asombrosa. Me sentí... no sé. Conectado... o algo así. No puedo explicarlo. -Suspiró e hizo una mueca-. En realidad me hubiera gustado haber tenido más control. A Kate la noté un poco estrecha. Me comentó que llevaba casi dos años sin mantener relaciones sexuales.

-¿En serio? ¿Y por qué nos ha invitado a su casa para que nos acostemos con ella?

Tras vacilar, Harry negó con la cabeza.

-No importa. Mañana le enviaré flores y eso será todo.

-¿No piensas volver a verla? -No era algo que sorprendiera a Danny. A Harry no le gustaba que le recordaran que había perdido el control de esa manera.

-¿Por qué lo preguntas? ¿Aún estás caliente por ella? - Harry ladeó la cabeza y le dirigió a Danny una mirada ladina-. ¿Acaso piensas echarle un polvo si regresamos por aquí?

-No. -Danny frunció el ceño como si una luz se hubiera encendido de repente en su cabeza-. Por eso me has traído aquí, ¿verdad? Sabías que no me acostaría con ella.

-Lo sospechaba. Quería probarlo. Si hubieras tocado a Kate, habría sabido que no estás enamorado de Alex.

Maldita sea, ahora sí que había cavado su propia tumba. Harry había conseguido la prueba que necesitaba. Lo había presionado para que recapacitara e intentara recuperar a Alex. Y lo había hecho de manera implacable.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------

Recuerden que entre más comentarios nos dejen y haya más de 15 likes en el capítulo, más rápido actualizamos. 

Nos gusta que dejen sus comentarios y nos gusta leerlos. :D

Mrs. L. Poynter & Mrs. Y. Jones

PD: No se les olvide que si quieren que les avisemos cuando subamos capítulos dejen su user de twitter o manden un tweet a @MissLPoynter ♥

Se les quiere, y si también están festejando hoy el día de las madres, denles un abrazo muy fuerte de parte de nosotras. XX